Limar las uñas es uno de los pasos principales para tener unas uñas cuidadas. Limar bien las uñas también tiene dificultad, por eso os quiero contar algunos trucos.
Una lima de uñas mal utilizada puede hacer que tus uñas se vuelvan frágiles y quebradizas, por el contrario, si sabe usarse puedes conseguir un gran resultado.
Las uñas húmedas son las más frágiles. Lo correcto es limarlas con suavidad cuando estén muy secas. Siempre hacia la misma dirección para que no se astillen y teniendo cuidado de no limarlas muy cerca de la piel.
Lo mejor es limar las uñas de forma cuadrada mientras están naciendo, porque esto permite que las uñas crezcan más rápido y no se partan. Cuando estén lo suficientemente largas le puedes dar la forma que más te guste.
Hay que poner la lima inclinada hacia abajo, y moverla de manera firme desde la base hasta las puntas.
Después de limarlas ya puedes pintarte y decorar tus uñas cómo más te gusten
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